L.S.

Advertencia: el siguiente relato responde a un estricto orden cronológico. No así a la auténtica veracidad de los hechos. Los mismos pueden verse alterados y/o magnificados como consecuencia de la prosa del autor. Se intentará resguardar las identidades de los protagonistas.

La sentencia fue firme, rígida y precisa. “ Hoy nos ponemos en pedo. Estoy en la puerta de tu laburo, cuando salgas dame 20 pesos así compramos todo “, deslizó con su frecuente y distintivo carácter el mas físico culturista de los Ls.
El atardecer ensayaba su adiós con un programa por demás tentador. “ Vienen 7 chicas del laburo y la facu y hacemos fiesta en casa ”, dejó entrever la misma fuente. Por supuesto, el reloj sepultó toda esperanza de organizar un evento semejante. Sólo 3 presencias femeninas completaron una asistencia imperfecta pero suficiente. Un Ls, cuenta la leyenda, nunca da por perdida una noche.
Un fluido intercambio de opiniones futboleras ( “ si el Almeria me paga en dólares, me voy al Almeria “) inauguró una noche para el recuerdo. Las bebidas allí presentes resultaron la poción perfecta para concebir el peculiar ambiente, preso hasta el momento de una calma inusual. La ecuación la cierra Bernardo ( Ls en potencia ), un hormonal miembro de esta organización con dignas facultades.
Inesperadamente e interrumpiendo un pleno proceso de chamuyo ( del griego chamuyis, que significa mentir con el único objetivo de aparear ) del mas semental de los Ls ( “te molesta que le ponga mucho mani a la cerveza ? ” ) , la noche nos ofreció una brusca mudanza en su destino. Una casa en la calle Jose Maria Moreno nos ofrecía un digno refugio para culminar una jornada atípica.
Una desigual organización en el traslado ubicó a 5 Ls ( 4 de ellos en un dudoso estado de sobriedad ) en un coqueto Gol Power. Huyendo de una inadecuada alarma que ponía a prueba nuestra capacidad auditiva, una canción de Ricky Martin ( siiii se funden los fusibles, del corazoooon ) cobijó nuestras esperanzas de un agradable viaje. De repente, un factor amenazó la delicada armonía del vehículo. Una incomoda neblina proponía mas obstáculos a las ya conocidas y mencionadas dificultades del trayecto (“ asesine a Jackie Chan”, sentencia el único Ls rehén del amor ante el evidente traspié del auto con un pronunciado bache ).
Llegados a destino, la noche nos regaló una inusual presentación de la partes entre la Cupula Ls y el presunto dueño del inmueble:

- ¿ Vos sos Diego ?
- No, Nicolas
- Ahh y ¿ trabajas en el Veraz ?
- …….
- No, nada que ver…. Ok estos son mis amigos

Rápidamente, nos adaptamos a la confortable clandestinidad del ambiente. Mientras, Bernardo ejecutaba a la perfección un correcto intercambio de fluidos. Inesperadamente, los sucesos volvieron a virar elevando al máximo la capacidad de asombro de los allí presentes. La progenitora del principal promotor de este evento se hizo presente en forma inoportuna, dado el contexto de la situación. “ Esta es la gente con la que te juntas?. Váyanse todos o llamó al 911 ”, señaló, intentando recuperar algo del respeto que había perdido. La respuesta del Ls mas impulsivo fue tan aguda como fiel a su estilo: “ señora, esta fiesta es una mierda ”, sentenció, a escasos dos metros de su radio auditivo.
La sentencia, otra vez, fue firme, rígida y precisa. “ Che, no nos jugamos un gguini “, argumento este cuasi Mr. Musculo. La noche nos había entregado ya bastantes contratiempos. Demasiados para la óptica de un ciudadano corriente, suficientes para un Ls.

A continuación, demostramos los hechos a traves de la imagen y sonido. No es la mejor calidad ( tener en cuenta que es a traves de un celular, en medio de la noche y dentro de un auto ) pero sirve para graficar el relato. Especial atención al conductor que no conduce, a la mano de Longo cuan Gps señalando el camino y a los gritos de Dami de fondo.